¡Hay que aprender!


Voy a disculparme al principio porque esta es la primera vez que escribo en un mes y va a ser una entrada un poca larga. ¡Tantas cosas me han pasado! Para asegurar una entrada más corta, solamente voy a hablar de las cosas más interesantes, importantes y útiles.
Lo primero pasó en el aeropuerto. No sabía antes de irme a Santiago, Chile, aunque compré un billete para el vuelo, que no tendría un número de asiento. Al parecer, Delta vendió más billetes de lo permitido y por lo tanto hubo clientes sin asientos. Claro, necesitó una solución, por eso los asistentes de vuelo ofrecieron un cupón con el valor de $750 para quince personas quienes decidirían esperar un día más para que hubiese espacio para los demás. Sabía que mi familia y un chófer me estarían esperando y por eso decidí no tomar el cupón y en vez de esperar que otras personas fueran voluntarias. Claro, tuve suerte porque obtuve un número de asiento y pude llegar a tiempo. Esta experiencia me dio miedo y como oigo es muy común. Hay que tener cuidado y tener otra opción si algo pasa con el vuelo.
Llegue el 24 de julio y en las cuatro semanas pasadas, he experimentado muchas cosas. He conocido muchas personas de países diferentes, que hablan idiomas distintos. He viajado en la región de Viña del Mar y Valparaíso, así como otras ciudades que están cerca, como Concón. He visitado la playa muchas veces porque puedo caminar de mi casa a la playa muy fácilmente. La mención de la playa me lleva a otra experiencia importante de este viaje.
Un día estaba en la playa con unos amigos, bebiendo vino, mirando la puesta de sol y sacando fotos. Cuando me levanté para irme, no vi mi bolso. De repente, me di cuenta que los dos chicos que han actuado extraño también han robado mi bolso. Esta fue la experiencia más espantosa para mí hasta ahora. Casi todas mis cosas estaban en ese bolso, como mis tarjetas de crédito y debíto, mi tarjeta de identificación, mi dinero en efectivo, algunas hojas de papel que eran muy importantes, y otras cosas menos importantes pero muy útiles (gorra, guantes, Chapstick, lapices, tarea y mucho más). Esta experiencia también me ha causado mucha inconveniencia. Por suerte, todo va a estar bien, pero no voy a tener suficiente dinero para gastar ni viajar hasta recibir mis nuevas tarjetas. Me molesta mucho, pero es una buena experiencia de aprendizaje. Antes de esto, no era muy cuidadosa, pero ahora aprendí una lección importante y espero que los demás tengan más cuidado que yo.
Otro aspecto de esta vida en Chile es que los alumnos de intercambio tienen qu
e estar conscientes del paro estudiantil. Hace tres meses los estudiantes (secundarios y universitarios) empezaron una huelga y desde entonces no ha habido clases, excepto las de los extranjeros. Resumiendo, los estudiantes están luchando por la educación gratis para cada estudiante en el país. El problema es que Chile es un país caro, pero la mayoría de la gente no gana mucho dinero y es casi imposible poder pagar la matrícula sin créditos y estos créditos destruyen la situación financiera de los estudiantes después de graduarse. También, todos los otros países de América Latina ofrecen una educación gratis y los chilenos creen que no es justo porque su gobierno también tiene el dinero, pero no quiere ceder a los estudiantes. Este tiempo es una era crítica de Chile. Ayer fue la huelga más grande del país en una década. Los estudiantes están luchando y el gobierno está contraatacando. Los carabineros usan gas lacrimógeno para controlar a los estudiantes. Aunque muchos chilenos dicen que el paro va a terminar pronto, me parece que el problema se está desarrollando y se está convirtiendo en un problema más violento. Solamente podemos esperar y ver lo que va a pasar.
Ahora, estoy esperando mis tarjetas y planeando viajes mientras estoy asistiendo a la universidad y viviendo en una cultura nueva con una familia chilena. Todo es diferente, algunas cosas buenas y otras malas. He aprendido mucho y voy a aprender mucho más! Hasta la próxima!