Escrito por Fiorina Adorati
Universidad de
Santiago de Compostela, España
Les
tengo que avisar que me siento media rara; creo, porque extraño casa. Es algo
medio raro que me agarre de repente como si fuera la gripe. He tratado de ponerme en mejor humor, pero me
ha costado. Lo que pasa es que he llegado al punto que no quiero estar acá. Extraño
a mi familia, mi perro, mi cama y por su puesto mi prius. Es como que me siento
vacía y me falta algo o como que he perdido algo y no lo puedo encontrar. Me
encanta Santiago en general, ya que tengo amigas de diferente partes de Europa
(ninguna española), tengo españoles amigos y me he acostumbrado a la vida de acá.
Pero, estoy completamente cansada de maleducados y de hacer cosas que llevaría 5 minutes, llevan
horas y a veces días. Entiendo, completamente que estoy en un país muy diferente
al que me he acostumbrado y he vivido más de la mitad de mi vida. He intentado y
me he esforzado de tratar de adaptarme a la cultura española, pero todo que he
conseguido es mas risa y he encontrado más gente maleducadas. También,
entiendo, que hay buena y mala gente en todo el mundo. Pero, es como que toda
la gente que ha cruzado por mi camino, lamentablemente no ha pasado buena
gente. Aunque he encontrado un grupo de chicas que me divierto muchísimo es
como que me olvido de eso y sigo pensando porque no puede involucrarme con los españoles,
especialmente, las chicas españolas. No sé si estoy haciendo algo mal o que el
asunto es así acá. Por ejemplo, el otro día fui a la cocina sola para comer y había
un grupo de chicas gallegas y note que me miraban y se reían de mí. No sé
porque, pero me ha pasado varias veces y además te miran con unas caras no tan
lindas. Entonces, me fui a comer en my cuarto como si fuera una chica
adolecente ocultándose del mundo cruel. Pero igualmente, estoy contenta de
haber tenido la oportunidad de haber podido estar estudiando en Santiago a
pesar de las cosas malas que me ha pasado. Lamentablemente, me he acostumbrado
a los maleducados. Finalmente, extraño a mi familia muchísimo y espero que la
llegada de mi hermanita, Kathy, me alegré. ¡Hasta Pronto!