La familia, en general, es muy importante a la cultura chilena. No hay familias tan grandes, pero son unidas. Los hijos viven en la casa por mucho tiempo, y por muchos hasta se casa. La parte más importante a la familia es la mamá. La mamá cocina, limpia (si no hay nana), lava la ropa, y trabaja. Ella es una mujer fuerte. He encontrado que hay una imagen buena y una imagen mala de la mamá chilena.
La imagen buena es una imagen como dije, de la mamá en la casa cuidando los niños, cocinando, limpiando y haciendo todo por su marido. Ella es cariñosa, amorosa, y atenta. Cualquier cosa se necesita, hace. Quiere cuidar de todo y ser la jefa de la casa.
La imagen mala es obvia en este relato que leí en mi clase de cultura chilena que se llama "La mami chilena" por Rafael Gumucio:
"A un amigo, su madre lo tuvo convencido hasta los 17 años de que tenía asma. Bastó que se fuera a la casa de su abuela - una mujer un poco menos manipuladora que su mami - para que se le quitara la grave dolencia respiratoria.
A otro, su madre les pagó a unos pelusas de barrio para que lanzaran piedras sobre la ventana de su hijo y su esposa, impidiendo así que se consumara la boda. A otro lo despertaba con una cuchara de agua bendita. Otra madre no le ponía plato en la mesa a su nuera.
En Chile los hombres no existen. Cuando embarazan a sus mujeres mueren, o desaparecen, y apenas dejan fotos y el apellido para el niño. Si hay un país en que se puede repetir el milagro de la concepción inmaculada es en Chile. Claro que si la virgen fuera chilena, pondría el grito en el cielo si Jesús se fuera de la casa sin casarse; ni lo dejaría juntarse con lo 12 andrajosos con que solía reunirse. Otro tanto le habría ocurrido a Napoleón, Einstein o Beethoven. Con tal que no se resfriaran, la mami chilena no habría dejado a estos genios salir de sus casas.
La madre chilena, la mami, es mucho más dominante que la judía o la italiana. No necesita gritar o llorar. Sólo mira con esos ojos de gallina apaleada, la rabia india apretando lo labios, las manos cruzadas rezando, para que el hijo, sin chistar, agache la cabeza y obedezca.
Por eso es que casi todos los chilenos tenemos la voz aflautada y los gestos suaves de nuestras madres. Y por eso también que, como niños borrachos, caminamos por el mundo esperando una mujer virginal y suave que se quede embarazada de nosotros, y nos eche de sus vidas para cultivar de nueve en ente tan dependiente y desvalido: es decir, un hijo." (Rafael Gumucio)
Como implica este relato, la mama chilena es una manipuladora y dominante. Ella quiere que sus hijos comportan en una manera específica y que la mamá siempre tiene todo el control. Es obvio que el autor cree que los hombres chilenos son tímidos a la culpa de sus madres. Me parece, es esa manera, que es como un círculo porque las madres crecen sus hijos y siempre la mujer es dominante y el hombre es tímido.
Encuentro que este relato tiene sentido y es verdadero en algunos casos de las madres chilenas. Mi mamá chilena quiere hacer todas las cosas, pero ella no es tan manipuladora ni controladora. A pesar de mi mamá, he visto que hay muchas mujeres como así y muchos hombres chilenos que no parecer tan fuerte, especialmente en conexión con sus madres. Es un fenómeno muy interesante de Chile, que es también muy distinto que los EE.UU. y mi familia.